"¡Sí, señor!"
"!Un corto con mensaje!"
"¡Oso panda!"
Y por otro lado este fin de semana de rodaje ha sido una de cal y otra de arena. El sábado por la mañana teníamos una escena interpretativamente complicada y por la tarde teníamos tres planos muy sencillos. Curiosamente, aunque de curioso no tiene nada, lo de la mañana fue de perlas y lo de la tarde fue un caos. La verdad es que es impagable la sensación de rodar con calma y sin prisas, cada vez tengo más claro que trabajar bajo presión es malo principalmente para la película. Afortunadamente la escena importante era la que rodamos por la mañana.